Cerca de 70 pacientes con adicciones a las drogas fueron encontrados en un lugar en hacinamiento e insalubridad; además, la falta de atención médica ponía en riesgo la vida de algunos de los internos, por lo que la Acess procedió con la clausura inmediata.

Agentes de la Policía Nacional fueron los primeros en entrar y su primera acción fue el rescate de un hombre de aproximadamente 30 años de edad que permanecía encadenado y presentaba signos de tortura. Con su rostro visiblemente golpeado relataba que era víctima de maltratos físicos como pasar corriente por los dedos de sus pies por no memorizar frases y rezos que son costumbre repetir en este tipo de sitios.

Se halló un espacio reducido con puerta, en cuyo interior había restos de sangre, por lo que se presume habría sido utilizado para castigos y encierros. Mientras que en todas las habitaciones contaban con rejas y en un dormitorio la ventana había sido sellada con bloques.

Este caso era parte de la escena observada en un nuevo lugar ubicado en el sector de Urbanor, norte de Guayaquil, provincia del Guayas, el cual funcionaba de forma ilegal ofertando tratamiento, sin fundamento técnico o con base científica, a personas con consumo problemático de alcohol y otras drogas.

La Agencia de Aseguramiento de la Calidad de los Servicios de Salud y Medicina Prepagada – Acess, intervino en el ámbito de sus competencias en un operativo interinstitucional en el que participaron también la Policía Nacional, Dinapen, Ministerio de Salud Pública, Cuerpo de Bomberos de Guayaquil y la Dirección de Justicia y Vigilancia del Municipio de Guayaquil. Como resultado se ejecutó su clausura como medida provisional de protección ante un posible riesgo para la vida.

Entre otras irregularidades, un interno presentaba síntomas de abstinencia por lo que requería atención médica urgente, la misma que fue proporcionada por personal del Ministerio de salud Pública, quienes también socializaron y ofertaron sus servicios gratuitos de tratamiento ambulatorio y de internamiento a todos los pacientes y sus familiares.

Pero las ilegalidades se extendían conforme las autoridades continuaban su recorrido por el establecimiento, en donde también fueron encontradas 4 mujeres y un menor de edad, incumpliendo los modelos de programas terapéuticos y reglamento interno que prohíben la permanencia de diferentes grupos etarios y de género en el mismo lugar.

Durante la evaluación médica y psicológica, algunos de los pacientes denunciaron maltrato, prohibición de visitas de familiares y mala alimentación, que fue evidenciada durante la hora de almuerzo que consistía únicamente en un plato de arroz con un vegetal cocinado.

La Acess está al servicio de la ciudadanía en su lucha contra la clandestinidad y oferta ilegal de tratamientos para adicciones en infraestructuras inadecuadas y sin la participación de profesionales de la salud y exhorta a la ciudadanía a denunciar estos casos al correo: denuncias@calidadsalug.gob.ec o en sus oficinas técnicas o informativas en las 24 provincias del país.

En Guayaquil, la Acess está ubicada en la ciudadela La Garzota, avenida Guillermo Pareja y René Idrovo, Edificio ‘Centro de Oficinas de Plata’, segundo piso, oficina 205.